Si dentro de tus planes esta comprar una caldera para la calefacción, el agua caliente sanitaria o, bien sea para ambas, es importante que sepas cual es el combustible más usado y el porqué.
Por si no lo sabias, las calderas suelen utilizar varios tipos de combustible, según su tipo de sistema. Algunos de estos materiales suelen ser los principales emisores de contaminación. Sin embargo, existen varios materiales combustibles de calderas que tienden a ser más eficaces y producir aire limpio que contribuye al medio ambiente. Conozcamos a continuación los tipos de combustibles en las calderas y cual es el más utilizado.
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Gas propano
El gas propano es uno de los combustibles utilizados en las calderas. Puede decirse que es uno de los más usados, por su forma de suministro y ahorro en consumo de energía. Otra característica de este tipo de gas es que se puede conseguir en 3 formas para ser suministrado a la caldera:
- En tanque
- Deposito
- Botellas
Gasoil
El gasoil es un combustible usado en calderas cuya única utilidad es la calefacción. No obstante, son muchas las desventajas que tiene este tipo de combustión a diferencia de otros. Y es que este producto es contaminante y de olor fuerte, por lo que, al instalar una caldera con este combustible, es necesario un espacio amplio o una habitación que se ubique a las afueras de la vivienda.
El gasoil es un combustible costoso. Además, se necesita comprar y transportar, lo que genera más trabajo, dinero y esfuerzo.
Gas natural
Es el combustible más usado en las calderas por producir aire purificado y, por tanto, menos emisiones contaminantes. El gas natural es una de las opciones más económicas y reduce costos en energía, aprovechando al máximo sus recursos. Tiene la ventaja de que al instalar una caldera con gas natural, no se necesita de espacio extra en tu vivienda, tampoco tanques ni botellas, puesto que todo es canalizado mediante tuberías.
Electricidad
Las calderas eléctricas son las más recomendadas porque no utilizan combustibles dañinos que puedan provocar daños tanto al medio ambiente como al usuario. Sin embargo, al ser la electricidad el único combustible para realizar los procesos de calentamiento de agua, es mayor el consumo de energía y, por ende, más costoso. También, tiene que tomarse en cuenta que se debe cambiar la potencia eléctrica por una más elevada que pueda resistir el proceso de la caldera sin generar problemas.
Biomasa
En el caso de las calderas de biomasa, se utilizan variados tipos de combustibles y, hasta se pueden utilizar más de uno al mismo tiempo. En este caso, los combustibles más usados son pellet, astillas de madera, frutos secos, leña, huesos de aceitunas, y más. Aunque sea un material que no es dañino sino, biodegradable, lo que se puede considerar como una desventaja es que se debe tener una gran cantidad del mismo, si es posible, un almacén entero.
La energía solar
Este combustible es reciente y usado en la actualidad que, funciona de gran apoyo a los radiadores que climatizan las viviendas. Sin embargo, no es un tipo de suministro para calderas que podamos usar siempre.
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